En el mes de abril del año 2004, época en la que realicé mis últimos trabajos como ilustrador editorial, publiqué en una revista un dibujo acompañando un artículo de Tamar Jacoby titulado La conexión Mexicana. En el texto se analizaba la relación entre un par de pueblos de la Mixteca poblana y Nueva York a partir de la creciente emigración originada hacía 50 años con el programa Bracero. Una de estas poblaciones era Piaxtla, ubicada dentro del grupo de los llamados “pueblos fantasmas de Puebla”, comunidades que se encuentran en peligro de desaparición por el desplazamiento masivo de sus habitantes a los Estados Unidos.
Cuatro años más tarde tuve la oportunidad de llevar acabo algo que siempre había deseado cuando una historia me interesaba en la época en que hacía ilustraciones por encargo. Quería desbordar las condiciones y formato de ese oficio que abandoné, y romper con la subordinación de las imágenes frente al autor y su texto. De ahí fue que surgió la idea de retomar ese artículo y abordar el fenómeno de la relación entre México y Estados Unidos partiendo del análisis concreto de la situación que se vive en Piaxtla y su vínculo con la ciudad de Nueva York.
Durante un período de mes y medio viví en el pueblo, tiempo en el que me dediqué a dibujar relatos de su gente, tuvieran o no que ver directamente con su particular relación con Estados Unidos. La presidencia municipal nos otorgo a mi asistente y a mi un cuarto en la Casa de Cultura para trabajar. A toda persona que conocía le pedía que me narrara algo que creyera que valdría la pena ser recordado de ese sitio. Las historias con las que me encontré fueron de todo tipo, leyendas, mitos, hechos recientes, costumbres, descripción de lugares, etc. A casi nadie le parecía relevante hablar de la condición “fantasmal” del pueblo y de las razones por las que esto empezó a suceder décadas atrás.
Tardé en darme cuenta de que muchas de esas historias, aunque en un principio no lo parecían, explicaban el origen del desplazamiento de sus habitantes a Nueva York. Muchos de los dibujos que realicé provenían de creencias relacionadas con la vigilancia de los ríos y los cultivos por parte de nahuales. Es sabido que el abandono de la agricultura debido a las constantes sequías fue una de las principales razones por la que se empezó a emigrar.
Selección de 34 dibujos, medidas variables.
Con la asistencia de Enrique Arriaga y la colaboración de los habitantes de Piaxtla. Pue.
Producido por Casa del Lago, Cd. de México.