La casa donde actualmente se ubica la galería Labor fue construida en 1948 por el arquitecto Enrique del Moral en lo que era un rancho y mina de arena y tepetate. En ella vivió durante tres décadas con su esposa Elisa Madrid Moreno. Tras ser adquirida por el arquitecto Fernando Romero, en el año 2003 la construcción fue modificada drásticamente para albergar su estudio y en 2012 comenzó a funcionar como galería.
La pieza principal de la exposición toma como punto de partida la historia del sitio, en concreto la zona del jardín que, previo a la intervención de Romero, se extendía hasta lo que ahora es la sala de exhibición y la bodega de la galería.
La intervención que propuse consistió en comunicar la sala de exposiciones con el exterior por medio de una gran puerta que permaneció abierta durante toda la muestra. Un agujero muy grande se cavó en el jardín y los picos y palas utilizados en el trabajo fueron fundidos y convertidos en sellos con los que se marcaron una serie de patrones en las paredes y fondo del mismo agujero. Estos se inspiraron en elementos del jardín como hojas, flores y huellas de los perros que habitan en el lugar. Del agujero estampado se obtuvo un vaciado de cemento a manera de negativo que se presentó en el interior de la galería junto a la estructura de metal y madera que hizo posible su desplazamiento.
Otro de los trabajos consistió en unos pequeños filos colocados en los muros obtenidos de herramientas de trabajo como cinceles, cuñas o picos. Existe la creencia en el gremio de los herreros de que estos trozos de metal, si se ponen al rojo vivo en la fragua y se enfrían en un vaso de agua, le confieren a ésta poderes. Al beber uno el líquido solucionaría problemas de salud, sentimentales, laborales o de cualquier otra índole. A estas piezas les di un nuevo estado funcional en la exposición al usarlas para sostener una serie de dibujos a lápiz sobre un papel muy frágil basados tanto en situaciones relacionadas con las modificaciones que la casa ha sufrido, así como con el proceso de fundición de las herramientas.
El título de la exposición proviene de "Los temas morales modernos" de William Hogarth y funciona en este caso como juego de palabras al empatarlo con los elementos que componen la exhibición. Así era como el pintor denominaba a las series satíricas que realizó basadas en la sociedad londinense de la primera mitad del siglo XVIII.
8 dibujos (29.7 x 21 cm) y 2 (42 x 29.7 cm)
lápiz sobre papel revolución, piezas de acero
y estructura de cemento y varilla
465 x 360 x 95 cm
Producido por Labor.
Con la asistencia técnica de Óscar Garduño y del equipo de Bonifacio Lopez.